martes, 17 de julio de 2012



Sin previo aviso el andar del reloj destruye el presente, es normal que sea tan rápido? No creo ser el único en el globo que quiera quedarse aquí para siempre. Las yagas que ayer dolían hoy respiran felices pero siento que no es suficiente.. qué falta? No te ilusiones, no eres tú.. nada más necesito un poco de memoria, acordarme de todo lo que has hecho, una inyección de odio que me cura de esta enfermedad. Mirar por la ventana y darme cuenta de todo lo que me pierdo me hace sentir que tengo muy poco tiempo para vivir, voy de un lado para otro como preparándome para una obra que jamás se estrenaré, y es que pasamos tanto tiempo de la vida preparando el futuro que nada queda del presente, es este pasar de la vida el que hace que no nos sea posible efectivamente vivirla, el reloj que nos come vivos es testigo de nuestra necedad.. ignaros de un incierto destino lanzados a la vida como un naufrago a una isla, qué más queda sino vivirla? La tragedia de la vida es maravillosa hasta que un aliento nos la quita, es ahí donde reside el sentido más crudo de nuestra existencia.. y es que nacemos para morir.

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